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Convivencia en las aulas
13. Acoso escolar
Acoso escolar
Es uno de los problemas más graves que se plantean en la convivencia de los centros escolares. La falta de respeto a los demás, el aceptar al otro tal cual es, la empatía, chocan con la ley del mas fuerte y la ley del silencio. El acoso destruye la autoestima y la confianza de la víctima, le provoca ansiedad, puede llevarla a la depresión y le crea dificultades para adaptarse a la sociedad.
¿ Qué hacer ?
- Avisar siempre al centro. Si no se quiere hacer directamente, en el instituto tenemos una dirección de correo, sos.calistoymelibea@gmail.com, en el que se puede informar con toda discreción sobre lo que ocurre y hacer que el centro tome las medidas que sean necesarias para evitar que continúe el acoso y para que apliquen medidas sancionadoras a los agresores.
1. La víctima: Mis compañeros se meten conmigo
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Ignora al agresor, como si no lo oyeras, ni siquiera lo mires.
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Que tu lenguaje corporal no dé la impresión de que tienes miedo (no puedes ir con los hombros hundidos y los ojos bajos)
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No llores, ni te enfades, ni muestres que te afecta, eso es lo que el agresor pretende, no le des esa satisfacción. Aunque te sientas verdaderamente mal, no dejes que se te note. Más tarde podrás hablar o escribir sobre tus reacciones.
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Recuerda que tú vales tanto como cualquier otra persona, quiérete. Nadie tiene derecho a hacer sufrir a nadie. Tú no tienes la culpa de ser agredido.
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Responde al agresor con tranquilidad y firmeza. Di, por ejemplo: «¡No!» «Eso es lo que tu piensas.»
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Si puedes, trata de ironizar o tratar con humor lo que te diga. Por ejemplo. «¡Qué pantalones más ridículos!» y tú dices «¡Gracias! Me alegra que te hayas dado cuenta.»
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Aléjate o corre si es necesario si crees que puede haber peligro. Aléjate de la situación. Vete a un sitio donde haya un adulto. Tú no tienes que hacer frente solo a esta situación.
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Si eres una víctima permanente de los agresores, lo más importante que tienes que hacer es hablar con un adulto.
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No te tiene que darte vergüenza. Si lo haces sólo, posiblemente no puedas hacer frente con el acoso continuo de los compañeros
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Comienza con tus padres. Eso no es acusar, es pedir ayuda a las personas que te quieren cuando de verdad las necesitas. Haz que tus padres lo hablen con alguien del colegio, nunca con los padres del agresor.
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Si sientes que no les puedes contar a tus padres o que tus padres no te apoyan de la manera que necesitas, habla con otro adulto en quien confíes, un profesor, el director, el orientador. Si no quieres hablar de ello con nadie a solas, lleva un amigo, hermano. Te ayudará mucho llevar a alguien que haya visto cuando te atacan.
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Haz que al adulto le quede claro que esa situación te afecta profundamente. Especialmente si eres víctima de «agresiones verbales», porque muchos adultos no consideran graves las agresiones verbales. La realidad es que esta clase de agresiones es la que más daño puede hacer.
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No te resignes, haz cualquier cosa que se te ocurra, pero no respondas de la misma forma, eso agrava la situación. No te rebajes a ello.
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Si sientes que no puedes decírselo a nadie, trata de escribir una carta contando lo que te sucede. Dásela a un adulto en quien confíes y guarda una copia para ti.
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Recuerda: Decirlo no es chivarse, es defender tus derechos y trabajar a favor de la convivencia
2. Los espectadores: veo como se meten con algún compañero.
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Hay quien dice que “quien calla, otorga”. No debes ser cómplice de una situación de maltrato. El testigo es casi tan culpable como el agresor, ya que con tu silencio apoyas al que acosa a los compañeros.
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No te rías de las gracias que hacen los acosadores, no apoyes esos actos.
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¿Sabías que si alguien que está presenciando una agresión dice «¡Basta ya!», en la mitad de los casos se termina esa agresión? Eso es difícil de hacer, pero es muy importante hacerlo. Estarse parado y no hacer nada es aprobar la agresión. Eso te iguala al agresor mismo.
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Decirle al agresor que pare, por ejemplo: «¡Para, ya está bien!». «¡Eso no tiene gracia». «¿Te gustaría que alguien te hiciera lo mismo?» Haz que el agresor sepa que lo que está haciendo es algo malo.
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Si ves que no puedes decir nada, vete del sitio y díselo al adulto más cercano y haz que vaya a ayudar, ¡Eso no es acusar, es ayudar!. También puedes escribir al correo del instituto: sos.calistoymelibea@gmail.com
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Si ves a alguien que sufre una y otra vez las agresiones de otros, sea quien sea esa persona, puedes hacer mucho para terminar esa situación.
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Habla con la víctima, pregúntale cómo se siente. Haz lo cuente a sus padres o a un profesor. Dile que vas con ella si eso le ayuda.
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Si el acosado no quiere hablar con nadie, ofrécete tú a hablar con alguien en su nombre.
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Involucra tanta gente como puedas: a otros amigos o compañeros de clase, mediadores escolares, a padres, profesores. Recuerda que hablar de esto no hace que seas chivato, sino que te preocupes por tus compañeros
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No utilices nunca la violencia contra los agresores. Son otras personas las que deben solucionar la situación pero recuerda siempre que tu ayuda es muy importante.
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Y no te calles. Nunca permitas el acoso
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Lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena (Gandhi)
3. El acosador: a veces me meto con algún compañero
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Si eres un chico de los que agrede a un compañero, posiblemente tengas un problema. No vas a encontrar respeto, felicidad o satisfacción agrediendo a las personas.
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¿Por qué te metes con la gente? Debes buscar el motivo por el que necesitas agredir o insultar a alguien (especialmente si crees que son más débiles que tú).
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No olvides nunca la palabra. Muchas veces se agrede por no saber expresar con palabras sentimientos de enfado, estar asustado o herido… Entonces descargamos nuestras frustraciones sobre otros, algo que te puede hacer sentir mas valiente… PERO NO ES ASÍ, puesto que no has solucionado el problema de raíz.
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Ten empatía: Si te paras un momento y te pusieras en la piel del otro, te darías cuenta de que agredir a los demás no es la solución a tus problemas.
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No hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti.
¿ Cómo evitarlo ?
La familia
Es esencial para la socialización de los niños, a través de la transmisión de valores, normas o comportamientos. La familia es la que tiene que establecer lo que es inaceptable y lo que es aceptable, en casa y en las relaciones sociales.
Según los expertos en acoso escolar, la ausencia de reglas, la falta de supervisión y de control razonables de la conducta de los hijos fuera del colegio, de lo que hacen y con quién van o una disciplina demasiado dura, la falta de comunicación y la presencia de tensiones y de peleas en la familia, pueden llevar a los hijos a la adquisición de conductas agresivas.
Para mantener alejados a sus hijos del acoso hay que:
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Preocuparse por los hijos, hablando con ellos y creando un canal de diálogo. Evitar los monólogos. Se aprende y se conoce mejor a los hijos, escuchándoles.
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Estar pendiente de los posibles síntomas como nerviosismo, falta de apetito, insomnio, bajo rendimiento escolar o fobia escolar.
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Controlar y supervisar las conductas de los hijos, observando qué hacen, a dónde van, con quién juegan, cuáles son sus intereses y proyectos.
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Determinar los límites y las normas. Exigir el cumplimiento de las elementales.
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Educar para controlar las emociones, para comportarse con los demás y para convivir con otros.
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Observar los comportamientos, estados de ánimo y cambios en los hábitos de los niño
El centro escolar
El tipo de disciplina que exista en las aulas es de fundamental importancia en la construcción de una buena conducta. El centro tiene que establecer reglas para evitar el acoso como:
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mantener un buzón de sugerencias y de quejas siempre abierto,
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tratar el tema a través de cursos, conferencias o tutorías,
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introducir y mantener asignaturas de educación en valores
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ntervenir de una forma rápida, directa y contundente en el caso de haya alguna sospecha de acoso escolar.
Los medios de comunicación
Deberían controlar más los contenidos que emiten o publican y la forma en que lo hacen. La sociedad en general debe prevenir y atajar posibles brotes de acoso.
¿ Por qué hay que respetar al otro ?
Porque todas las personas tienen unos derechos y unos deberes para con los demás.
Derechos
· Tengo derecho a ser yo mismo y nadie puede tratarme de manera injusta por lo que pienso, por mi manera de vestir, por mis ideas o por mi manera de ser.
· Tengo derecho a ser respetado por mis compañeros, profesores…
· Tengo derecho a estar seguro y nadie puede darme empujones, ni amenazarme, ni pegarme, etc.
· Tengo derecho a que mis propiedades sean respetadas y nadie puede robarlas, maltratarlas, etc
· Tengo derecho a disfrutar de mis relaciones sociales y nadie debe excluirme.
· Tengo derecho a formarme y nadie puede impedirme entrar en clase, participar en las actividades del grupo…
Deberes y responsabilidades
· Tengo que respetar al resto de personas.
. No puedo discriminar a la gente por su forma de pensar, de vestir, orientación sexual, etc.
· No debo herir los sentimientos de los demás, hablar mal de la gente, sembrar rumores...
· Debo respetar las pertenencias de los demás. No debo robarlas, romperlas, etc..
· Tengo que colaborar para que el centro y, la ciudad en general, sea un lugar seguro.
· Tengo el deber de ser ciudadano: participar en la sociedad, conocer y respetar los derechos humanos, los valores democráticos, etc.
Para saber más
http://www.gobiernodecanarias.org/educacion/5/DGOIE/PublicaCE/docsup/guia_acoso.pdf
http://www.asociacionrea.org/index.php?option=com_content&view=category&layout=blog&id=41&Itemid=100021
http://www.savethechildren.es/acoso-escolar/que-hacer.php
http://www.guiainfantil.com/educacion/escuela/acosoescolar/papelpadres.htm
Fuentes
http://www.ceroacoso.org/desarrollo.shtml?idboletin=1556&idseccion=8331
https://bullyingcesdon.wordpress.com/feed/
http://www.savethechildren.es/acoso-escolar/
http://www.acosoescolar.com/recomendaciones.html
www.convivenciaenred.org
Contenidos: Mª Generosa García Bernardos * Profesora de Latín y Coordinadora de convivencia
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